no soy mala, es que me dibujaron así

Soy la mala


Se abre el telón. Ella está sentada al fondo, muy al fondo, en un pequeño taburete. Fuma sin descanso, de vez en cuando les mira, entre bocanadas. Tiene aquella mirada del que se sabe valiente, del que gusta pasear por el suelo donde todos hollaremos, buscando lo que nunca existió.

Ella sabe que los sueños son estrellas que nacen en los ojos de la gente. Es el lugar más cercano desde el que ven pasar la realidad en la que les gustaría cumplirse. Cuando la ven, se ponen muy nerviosos, y tiemblan. Por eso cuando los ojos de La Mala observan las mentiras y verdades, los actores, escenarios, mediocridades, historias y magia que nos ofrece el mundo de la comunicación, brillan.

Porque las verdades siempre pueden llegar a ser mentiras. Pero lo bonito de las mentiras, es que nunca podrán convertirse en verdades, y sin embargo, parecerlo.

No podría terminar estas líneas sin un recuerdo a mis creadores, Pixel y Dixel, a quienes debo mi existencia. El logo es de BlanK, una amiga de Pixel a la que todavía no conozco, pero a la que agradezco mucho el «dibujín» ya que es perfecto…

Y poco más. Que espero que lo que leáis aquí os guste…