no soy mala, es que me dibujaron así

Adoro el trapecio

Adoro el trapecio. Desde allí os veo, y cuanto más arriba estoy, más pequeños os hacen mis ojos. Si estoy abajo, casi puedo rozar vuestra piel, pero no, nunca me caigo, y procuro no aparecer del todo. Soy un resto del viento, y con él y por él me muevo. Si me doy impulso es porque sé que la caída hacia atrás será más grandiosa, y no por el avance. Adelante, atrás, adelante, atrás. No tengo otra perspectiva. Si desde el aire abro las manos tratando de cazar el presente, resulta inútil. Siempre se me escapa, ávido por mis dedos, quizá en busca de algún ente con cavidad.

Hay veces que no me importa nada, muy pocas veces. ¿Coincide? que esas veces son las que estoy contigo. Son los minutos del lapso en los que mis movimientos, mi roce y hasta los suspiros son una prolongación de mí. Y mi lengua, el trozo de carne hilado con saliva que mejor expresa mi sexo. Entonces me desnudo con franqueza, y a pesar de no importarme nada, tengo la certeza de haber comprendido. Lo bueno de ti es mantenerte como ser interrogante, eso me convierte en exploradora del humo, con cantimplora rebosante de restos. La gata zarpeando el cielo, al pájaro en pleno vuelo. Tiñendo las nubes de rojo, caníbal a unos metros del fuego, tan arriba, sus plumas ocultado su descenso, bajo unos labios que jamás le besarían por amor, sino por la pasión del instinto crudo y tieso. Eso te pasa por volar, y por menospreciar mi nervio. Y por cierto: te quiero. Creo que ya lo sabes, pero te lo digo. Te quiero y te necesito.

Allí arriba me siento dispersa y alejada. Tanto que me parecía ser la única que en realidad formaba parte de todo cuánto había allí abajo, me reía, me reía tan alto, que seguía siendo tan sólo yo quien me escuchaba. Tanto oxígeno a un salto y a la vez, con un simple soplido, el alma esparcida entre todos aquellos sonrientes muertos. No, hoy tampoco deseo un entierro. Hoy prefiero esperar a otro pájaro en vuelo

Tengo la sensación desde que estoy aquí, de haber olvidado un par de cosas. Cosas como escuchar algún tictac, o encontrar alguna puerta.

Comentarios

  1. 9 respuestas a «Adoro el trapecio»

    Pondré una vela; q guay!

  2. 9 respuestas a «Adoro el trapecio»

    Gracias chavales!!! Lo mismo digo fer, tiene que quedar tó en familia.

    Ay qué nervios!

  3. 9 respuestas a «Adoro el trapecio»

    ole!! estaremos aplaudiendo cuando ganes!!!

  4. 9 respuestas a «Adoro el trapecio»

    Enhorabuena a ti también!!!!

  5. 9 respuestas a «Adoro el trapecio»

    Felicidades malísima! Gran diseño para un gran blog!

  6. 9 respuestas a «Adoro el trapecio»

    coño!! gracias por avisar domi!!! ay qué alegría!!!

  7. 9 respuestas a «Adoro el trapecio»

    Felicidades Mala, por el 3er puesto en el 20 minutos!

  8. 9 respuestas a «Adoro el trapecio»

    como me gustaría perder el vértigo y volver a las alturas

  9. 9 respuestas a «Adoro el trapecio»

    Muy bonito, admiro tu imaginación y tu perspectiva de las cosas. Me abres puertas…