no soy mala, es que me dibujaron así

Onda 1,7

Si espera de mí una respuesta concreta, que espere. Yo voy suave. De acuerdo en que sé lo que me provoca una sonrisa. Y en que sé también lo que me pone triste. Pero si veo un chupachups, lo cojo y a veces me lo como aprovechándolo hasta el final. Y otras veces, me gusta más ver cómo los caramelos adquieren un aspecto feo cuando andan tirados por cualquier acera. La gente los mira con cada cara de desprecio…

Todo lo que hago es tratar de transportarme en la misma onda que el viento, no en cualquiera, sino en la que arrastra las olas dulces. Longitud de 1,7 cm, creo. Ni cresta ni valle. A veces mi espíritu adelgaza sin control, demasiadas palmaditas en la espalda me hacen tan ligera, que me elevo hasta casi desaparecer. Es entonces cuando trato de comerme alguno de mis versos más tristes, de manera que vuelvo a mi peso. No me quiero desorientar, pero mis venas otras veces engordan. Se llenan de letras gruesas y pesadas, rellenas de dolor. Letras como odio, cerrar o miedo. Noto que obstruyen mi sangre, que no fluyo, que peso y peso y peso. Hacia abajo, claro. Entonces procuro recordar a los musos y a las musas. Que aún se encuentran aunque ya no estén tan de moda, y por suerte siempre me rondan más o menos cerca.

Es importante también vaciarse de vez en cuando los bolsillos. A pesar de lo absurdo, los objetos menos queridos suelen ser los que más peso tienen. También se debe atender a lo hermoso de la libertad. De abrir los brazos, las piernas, los dedos de las manos y de los pies y sentir toda tu energía, cómo sale y cómo entra. Los destellos de luz sobre tu piel, y también la lluvia. No hay que olvidar atender a los susurros que vienen con el aire. Algunos son maravillosos, otros son tremendas mentiras, como ese que dice «cualquier día…» Otras veces llegan gritos que no son ondas normales de parte de algún desequilibrado, son conciencias sublevadas. Estos hay que procurar atenderlos siempre. Y hay que acariciarse, gustarse y de vez en cuando pegarse un buen pellizco, o un hostión.

Hoy le voy a regalar mi piedra de la energía, es uno de esos objetos que sientes muy necesarios y de los que hay que saberse, también, quitar. Aún me pregunto la manera de despertarme yo de todo esto, con la cantidad de días seguidos que llevo los ojos abiertos…

Comentarios

  1. 8 respuestas a «Onda 1,7»

    Ayer no se me cargaba tu blog…por más que lo intenté…pero hoy sí, hoy estoy aquí, fluyendo contigo, leyéndote y admirando como bailas el vals de tus pensamientos, poniendo las palabras al servicio de ese corazón tan bueno de Mala

    Estoy aquí disfrutándote, cuenta conmigo…para echar a volar cualquier día.

  2. 8 respuestas a «Onda 1,7»

    ¿Sabe cual es el problema querida amiga? Qué nos reimos poco. Yo ante una critica negativa siempre tengo preparada una sonrisa demoledora (y a veces un comentario hijo putesco, porque negarlo).Hagalé caso a la doctora, riase mucho y ya verá como los bolsillos se llenan de agujeros y se siente cada vez más ligera.

    Besitos muy dulces

  3. 8 respuestas a «Onda 1,7»

    No sé tú, yo a veces necesito un momento para mí solo. Solamente para cerrar los ojos, no pensar en nada y respirar.

    Y darme cuenta de respiro. Y poner en su sitio mi cabeza y el resto de problemas (por ese orden).

    Cuando entiendes cómo y porqué estás respirando valorar determinadas cosas resulta mucho mas sencillo ;).

    (unos días pareces una nave de vela que se mece en un lago y otras veces pareces el espíritu inquieto de un duendecillo travieso, conjeturar qué pasa por esa cabecita es todo un desafío… :P)

  4. 8 respuestas a «Onda 1,7»

    Saludos, te voy a dejar una cita, a ver si ayuda:
    «Es en los asuntos de gravedad donde las personas graves muestran su tremenda ligereza».

    Un beso reina

  5. 8 respuestas a «Onda 1,7»

    Que enigmática, mala… Sólo pasé a comentarte que ya pude escuchar la canción que me recomendabas de Dr Sapo. No había caído que era una versión de la canción de las Azúcar Moreno. Está simpática, muy positiva.

    Un saludito, and good vibrations for you.

  6. 8 respuestas a «Onda 1,7»

    Me encanta tu block. Insisto, block.

  7. 8 respuestas a «Onda 1,7»

    bueno, quiza es que no necesitas despertarte porqué no estas dormida… muchas de las piedras las fabricamos nosotros, de un pequeño guijarro hacemos losetas, de un pequeño problema una cantera traumática. ese amor a las piedras es victimista. mejor soltarlas, con todas las que vamos a encontar en el camino…
    un beso malo malísimo.

  8. 8 respuestas a «Onda 1,7»

    Hola Mala…………¿quien es El Clon ese?…
    Da igual, no importa….realmente parece un critico literario de la epoca mas rancia de nuestra historia…..Se que no le haces caso, pero……….yo si que quiero dar mi opinion y creo que tiene tanto valor como la suya…..
    YO SOY EL LECTOR…y puedo opinar sobre lo que leo…..y ,sinceramente…. él me aburre soberanamente….en cambio tú….me entretienes siempre que te leo, y eso es lo que busco…..eso es lo que necesito….¿Sabes?……No me hace falta tener conocimientos literarios, para saber lo que me gusta leer y me entretiene……..Es como el vino….no necesito ser un Enologo, para saber si un vino me gusta mas que otro, aunque el «otro», sea teoricamente mejor que el que a mi me gusta…….Sinceramente, creo que EL CLON, tiene un concepto equivocado de lo que tiene que ser un Blog..(yo prefiero llamarlo «diario de puertas abiertas»..jejeje)
    Yo pienso, que no tienen que ser un Best-Seller……..Simplemente ,tienen que ser Frescos…Naturales…Espontáneos y divertidos…..Y …Sinceramente Mala…..para mi….lo consigues…..Si te sirve de algo mi opinion……prestame mucho como escribes….¿ok?…..
    Besos.