Hace meses que algo, que nada, me aplasta el alma. Hace meses que siento que no aprendo lo que aprendo, que no avanzo lo que camino, y que me llama la atención lo mucho que puede ignorar mi presencia, a pesar de los días, aquella lombriz que vive en un trozo de musgo bien plantado. No es que no aprenda, no es que no vea, que no sienta. Es que hace meses que mi cuerpo me pide cambio, mejor dicho, me pide huracán. Hace meses que me agoté de mirarme al espejo y ver el perfecto vacío de mi espíritu, el que es perfectamente adaptable, perfectamente neutral. El superviviente a todo, a todos. Una mierda de espíritu de color blanquito con pecas y sonrisa mal colocada. Sin más.
Hace meses que ando sentada esperando cualquier brisa. Que cuando una me llega, la agarro con las dos manos y la aplasto tan fuerte que de mis manos termina saliendo arena. Tic tac, tic tac. El puto reloj de arena que crece a mi lado me está mareando. Y me levanto, y camino, pego un salto, grito, susurro, me río un montón, veo la película Death Proof junto a mi hermana y siento cómo la felicidad invade todas las esquinas de mis huesos. Ella se va a hacer sus cosas. A mí me da por plantar un árbol, empezar un libro, por leer más a Kerouac y decir ¡joder, yo le quiero a morir! Eso me jode que te cagas pensarlo. Llego a mi casa y mi perro Lolo me lame, mueve el rabito y se echa a dormir. A los tres segundos, ahí estoy, sentada en el bordillo esperando que me de la puta brisa en la cara. Tic tac, tic tac. El reloj ya me sacará unos 5 dedos de altura. Empieza a asustarme, porque encima cada vez que se ríe se le queda polvo en los labios. Salgo corriendo, corro a mucha velocidad, así quizá sienta el aire. Pero cuando lo quiero atrapar, pum. Ya no es aire. Sólo arena. Granitos formados por los huesos de algún muerto, un par de sueños ajenos solidificados y el grito sordo de alguien al que en el fondo todo le da igual. No quiero, hace meses que no me conformo ya con eso.
Quiero que entre aire fuerte, aire decidido. Por razones poéticas o políticas, me da igual. Aire que entre por mis venas, y que haga salir ya de una vez todo ese humo negro mezclado con silencio, que hace bolas de gangrena por todos los músculos de mi cuerpo. Que me encoge y me vuelve una masa viscosa llena de pena. Quiero que entre aire hecho de rabia, de energía. Un huracán que me remueva todas las entrañas y haga fluir todo el asco, todo el placer, todas las ganas que son sólo ganas. Que diga “No dudo de que quiero arrastrarte, llevarte, atravesar tu piel y agarrarte desde dentro, por dentro, con mi mano cogerte de lo más dulce, lo más delicado y bombearlo. Herirlo quizá, pero bombearlo. Elevarte al fin, y devorarte sin picarte, sin hacerte pedazos. Sólo querer sentirte entera. Herirte quizá, pero sentirte entera”
Quiero, que un huracán entre en mi pecho y me haga trocitos los huesos, los ojos, los músculos y el cerebro, el espíritu, el cuerpo entero. Un huracán que entre y rompa el reloj de arena, y el tictac. Un huracán que no tenga miedo. Sólo eso, alguien que se atreva a la vida de verdad.
Comentarios
16 respuestas a «polvo en los labios»
Te reeleo… y joderrrrrrrrrrr… !!!!! cómo me gusta ese último parráfo… !!!!!!!!!!!!!!!
Graciassssssssssssss….!!!!!!!!!!!!!!
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Hubo una época en la que sentía tanta claustrofobia de mi misma que me convertí en una cazadora de tormentas. Lástima que una de aquellas tormentas se convirtiera en un huracán devastador, cuidado.
El otro día me imagina haciendo cola para que La Mala de la Película me firmara su libro…
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Y quién no quiere huracanes…
De todos modos a veces hay que confiar en ciertas brisas del otoño. De esas que te van envolviendo poquito a poco. De esas que, apenas sin darte cuenta, se te meten por la nariz o en los ojos. De esas que cuando comienzas a respirar poco a poco se convierten en fina lluvia que nos empapa. Y que cuando menos te lo esperas te sorprenden revelándose tormenta tropical.
Lo único es que el paso que va de ahí al huracán no lo dan ellas.
Ése se encuentra en los ojos de aquellos que se quieren dejar empapar…
Un abrazo
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Espero que vuelvas pronto.
Que escribas más palabras.
Ya ves…
Me vuelvo impaciente, aunque siga siendo tan conformista como siempre.
Un besito castellonense
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Glubs, ahora me saco el puñal de la costilla, por lo del cine…
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Algo así rezaba en mi nick del msn hasta hace bien poco. «Me niego a relajarme, necesito una tempestad…»
Me encanta leerte aunque no siempre comente. Sólo quería que lo supieras.
Un besazo.
KissxxX
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En estos momentos ya llegado , me despierta una emocion pensar en esto ultimo.
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yo he encontrado a unas cuantas lucecitas nordicas…que estarian encantandos de calentar su sangre con tu sangre…ejem…
me voy callando que sino me paso al dark side
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Todos los huracanes llevan nombre de mujer (suena a tópico) lo es .Maldita mi vida , hoy quiero gritarlo, me haces gritarlo , hoy soy yo quien te coje robando ¿recuerdas? que dijiste sin titubear ,no pasas,¿porque?-dije-,por tu indumentaria inapropiada.-contesto-
Pero si llevo un puto lagarto pegado a mi polo, mí calzado es de marca, y voy perfumado, pero mi piel es morena,tostada,y llena de buenas intenciones.
-Señor explíqueme por que no paso,apartese,no bloquees la entrada.Pero hoy soy yo quien te coje robando, qué grande eres(pienso)pero tu altura y tus hormonas te pueden,y si, menguas,y si, hoy eres tu el ladron,y tu lo sabes, hoy llevas tu la vergüenza, hoy no pasas con calzado deportivo tu , lo siento, aunque siempre flipe con tus bíceps, eres solo eso, hoy yo pongo las reglas,¿te acuerdas? pasó mi chica, pero yo no, hoy eres tu el hombre menguante de1’90 y 110 kilos de pudor, ante mi yo menudo y plagado de buenas intenciones,te coji con las manos en la masa hoy me cago en todo lo divino,a la vez que lloro por todo sufrimiento ajeno ,ahora eres tu el ladrón y yo te he sorprendido.¿Vas a pagar eso?,pero te haces el macho.que bien vives tío, que bien se vive del cuento,por mi parte puedes pasar,por mi parte no queda rencor,aunque el día que tu me impidiste pasar mi novia se follo a mi mejor amigo.Hoy por mi parte tu si pasas…pero no te acomodes demasiado… tal vez te necesite pronto
Me agitas la sangre my love
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Joder, Mala….pensar que me avergonzaba escribir los «tacos», que pienso…..Cuando te leo, se me quitan los complejos de «malhablado»…jejeje…
¿Quieres un huracan?….Alguien que no piense, que solo actue, sin miedo y fuerte…
Alguien que se atreva a darte un remedio para tus males…..despues que se vaya….y que regrese solo cuando le necesites…
Pide que te envien uno del Caribe, de tamaño manejable….con un poco de suerte ,te soluciona todos los males…..Si lo consigues, nos avisas..jeje….
Un beso.
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Que el tiempo se rompa y desaparezca para que nos deje vivir. ¿verdad? Con todo nuestro cuerpo, o partes de él con las que más sentimos. Doloridas o no. Pero siempre estamos ahí, observando el tiempo y el tictac que tú mencionas. Y que el tiempo de verdad nos curara, cuando llegaran esas personas que se toman tan en serio la vida, que nos dan tanta felicidad como dolor… Y que empezamos a mirar nosotras también de frente a la vida, con los ojos brillando, con la sonrisa increcendo, con ganas de dar un paso.
No detengas el tiempo. Simplemente gastalo en vivir «mala»…Y de repente serás feliz en el instante más inesperado. Y sonreirás y tu sonrisa será tu mejor compañera.
Un besito
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Estoy ahí contigo, con tu tic-tac, esperando ese viento arrebatador, dador de vida.
Busca, busca incansable ese viento, Mala. Existe, seguro, si tu y yo podemos sentirlo es que detrás de alguna colina tiene que habitar, sólo tenemos que llamarlo con el corazón y vendrá a por nosotras.
Un abrazo enorme.
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Pues yo no quiero romper el reloj de arena… con lo hermoso qué es… gracias a él mi tiempo se rige a otro ritmo… más lento.. of course… granito de arena a granito de arena el tiempo… sigue su curso…invariable… lento… llenando los recovecos de mi alma de hermosas hojas de Otoño…
Cómo siempre … tus palabras golpean fuerte… entran en mi pecho con la fuerza del huracán que reclamas… cuándo te darás cuenta de qué el huracán eres tú…???
Un huracán al que no temo cuando abro las ventanas de par en par… para que llegue…entre y se pasee a sus anchas por los rincones de mis bosques…
A menudo …al leerte.. me viene a la mente aquella frase de …????? 😉 que dice :
«Cuanto más suave es la caricia… más penetra «…
Cuidado con los huracanes… al cabo de unas millas… pierden su fuerza… 😉
No me cansaré de decirte que me gustan enormemente tus letras…
Un abrazo con suave y fresquita brisa de las montañas ya otoñales…
16 respuestas a «polvo en los labios»
¡No lo muerdas! De vez en cuando la vida nos mira con cara de perro y sin bozal, pero entonces reconforta saber que no hay destino, pero sí futuro.
El mío anuncia un huracán, sí, pero de trabajo, detrás montañas de cosas por hacer. Así que yo, lo que necesito, son días de 48 horas, semanas de 14 días, meses de 8 semanas. En fin, me conformo con que 2008 sea bisiesto.
16 respuestas a «polvo en los labios»
¿Has probado a intentar crear ese huracán desde dentro?, seguro que así hay mucho más que granitos de arena.
Genial, como siempre, un beso reina.
PD: piensa en romper el reloj de arena, que lo malo es que esos chismes no tienen pila, y cuando se les acaba la arena por un lado, sale una mano misteriosa y les da la vuelta.
16 respuestas a «polvo en los labios»
el soplido de tu huracán me ha levantado hasta el flequillo….como tu dices, olvídate de ese puto reloj de arena…el tiempo nos marea….y los huracanes cambian de intensidad y varían su trayectoria…yo abro la ventana cada mañana y respiro el aire fresquito y pienso que hoy seré un vendaval.
un fuerte abrazo gradual.